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HR1VOZ > ISS 17.06.07 23:28l 240 Lines 13799 Bytes #999 (0) @ WW
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To : ISS@CEAM
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NOTICIAS DEL ESPACIO
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Vol. I, No. 648
Lunes, 11 de Junio de 2007
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-INFORME ISS/STS-117: El transbordador Atlantis y su tripulaci¢n se
hallan ya en la estaci¢n espacial internacional, donde proseguir n, durante
varios d¡as de actuaci¢n conjunta, con la construcci¢n del complejo orbital.
Con la cuenta atr s en marcha, todo estaba casi a punto para el
lanzamiento del Atlantis. Los ingenieros y t‚cnicos no hab¡an detectado
dificultades que pudieran ocasionar retrasos. La meteorolog¡a tambi‚n parec¡a
colaborar, con un 70 por ciento de posibilidades de que hiciese buen tiempo.
Aunque estamos en una ‚poca de tormentas de tarde, el viento en altura
barrer¡a las nubes de la zona de lanzamiento cuando debiera producirse el
despegue. En la rampa, el Atlantis ten¡a ya las compuertas cerradas, y el
personal hab¡a presurizado todos los sistemas de propulsi¢n.
Los ingenieros estaban haciendo un seguimiento especial, durante la
cuenta atr s, del ordenador que controla los motores principales SSME. El
Marshall Space Flight Center ha desarrollado una mejora que ser¡a introducida
durante esta misi¢n. El llamado AHMS (Advanced Health Management System)
proporciona informaci¢n adicional sobre las dos turbobombas que alimentan de
ox¡geno e
hidr¢geno l¡quidos a la c mara de combusti¢n. El controlador permitir apagar
el motor si los niveles de vibraci¢n exceden determinados l¡mites de
seguridad. El AHMS ya hab¡a sido utilizado en diciembre de 2006, durante el
vuelo STS-116, pero s¢lo en un motor, y sin capacidad de apagado autom tico.
Ahora funcionar¡a en modo activo, tambi‚n en un solo motor, mientras que en la
STS-118,
m s adelante, se aplicar a los tres SSME.
Tambi‚n se anunci¢ que el Atlantis partir¡a hacia el espacio con un
fragmento de historia estadounidense. A bordo transportar¡a una peque¤a placa
met lica de casi 400 a¤os de edad, con las palabras "Yames Towne", para
celebrar los cuatro siglos de existencia de Jamestown, el primer asentamiento
permanente ingl‚s en Norteam‚rica. La placa se encontr¢ en el fondo de un pozo
durante unas excavaciones recientes en James Fort, y se¤ala a Jamestown como
lugar de destino para una carga procedente de Inglaterra hacia 1611. Otros
objetos conmemorativos acompa¤ar¡an a la placa.
Tal y como estaba previsto, los siete astronautas que volar¡an en el
transbordador Atlantis llegaron al centro espacial Kennedy finalizando el d¡a
4 de junio. Aterrizaron a bordo de sus cazas de entrenamiento T-38, en la
pista de aterrizaje del Space Shuttle, procedentes de Houston. All¡, fueron
recibidos por el Director de Lanzamientos de la NASA, Mike Leinbach, y otras
personas relacionadas con la agencia y con la preparaci¢n del veh¡culo que los
llevar¡a al espacio el viernes, si todo iba bien. Como es tradicional, el
comandante, Rick Sturckow, se dirigi¢ a la prensa representando a su
tripulaci¢n y comunic¢ sus ganas de dirigirse a la estaci¢n espacial
internacional, tras tanto tiempo de entrenamiento. Los astronautas confiaban
plenamente en las labores de restauraci¢n y reparaci¢n del tanque externo
ET-124, que fue da¤ado hace unos meses debido a una lluvia de granizo,
obligando a aplazar el despegue.
Mientras, en la estaci¢n orbital, sus ocupantes no permanec¡an ociosos:
los cosmonautas rusos efectuaron su segundo paseo extravehicular el 6 de
junio. Fyodor Yurchikhin y Oleg Kotov abrieron la escotilla exterior del
m¢dulo Pirs a las 14:23 UTC, iniciando una excursi¢n que durar¡a 5 horas y 37
minutos. Su
primera tarea fue instalar un experimento ruso llamado Biorisk, que tratar de
averiguar qu‚ les ocurre a varios microorganismos expuestos a los efectos del
espacio. El contenedor qued¢ situado sobre el propio casco del m¢dulo Pirs. A
continuaci¢n, colocaron un cable Ethernet en el exterior del m¢dulo Zarya,
completando la red inform tica remota que permitir controlar el segmento ruso
desde el segmento americano, en caso de que sea necesario. Los dos
cosmonautas, supervisados por su compa¤era Sunita Williams, en el interior de
la estaci¢n, pasaron entonces a la tarea principal, completar la instalaci¢n
de los paneles protectores contra impactos que iniciaron durante la EVA
anterior. Situaron 12
escudos en la secci¢n c¢nica del m¢dulo Zvezda, junto a los 5 ya colocados la
semana anterior, y otros 6 que se instalaron en 2002. De esta forma el m¢dulo
quedar mejor protegido contra choques de micrometeoritos.
Durante el paseo espacial, transcurridas unas dos y media desde su
inicio, el control de vuelo solicit¢ a los astronautas que verificaran unas
botellas de ox¡geno presurizado en el m¢dulo Pirs. Estaban recibiendo lecturas
an¢malas y era necesario comprobar si estaban cerradas de forma apropiada. Un
an lisis de
la situaci¢n permiti¢ averiguar que se estaba produciendo una fuga de ox¡geno
de una tuber¡a que no qued¢ bien cerrada cuando fue desconectada del
correspondiente traje espacial, al principio de la EVA. El flujo fue cerrado
desde tierra.
Completada su misi¢n, los dos astronautas regresaron al interior del
m¢dulo Pirs, finalizando as¡ su segunda excursi¢n extravehicular. La
tripulaci¢n continuar¡a ahora los preparativos para recibir al transbordador
Atlantis. Williams se hab¡a ejercitado y tambi‚n hab¡a empaquetado resultados
que se llevar a la Tierra, as¡ como utensilios personales.
En la Tierra, aunque las tormentas retrasaron algunos de los pasos de la
cuenta atr s en varias horas, el transbordador Atlantis estar¡a listo para su
despegue a la hora prevista. Las c‚lulas de combustible fueron cargadas con
hidr¢geno y ox¡geno l¡quidos el jueves, y todo indicaba que podr¡an soportar
hasta cuatro intentos de lanzamiento en cinco d¡as. Los t‚cnicos revisaron
concienzudamente el exterior del tanque externo del veh¡culo, as¡ como los
motores principales. Se activaron los sistemas de comunicaciones y se
almacenaron los £ltimos art¡culos en la cabina del transbordador. Los barcos
de recogida y recuperaci¢n de los aceleradores s¢lidos ya se encontraban en
alta
mar, y la tripulaci¢n de la misi¢n STS-117 segu¡a prepar ndose para su vuelo,
incluyendo la pr ctica de aterrizajes en el Shuttle Training Aircraft. La
meteorolog¡a hab¡a mejorado a£n m s, hasta el 80 por ciento, y la £nica
preocupaci¢n eran algunas nubes asociadas con tormentas en el interior.
Tras una cuenta atr s final sin sobresaltos, el Atlantis encendi¢ sus
motores a las 23:38 UTC del 8 de junio, abandonando la rampa 39A del centro
espacial Kennedy en direcci¢n al espacio. El ascenso, en pleno d¡a, permiti¢
un seguimiento m s claro del comportamiento del tanque externo y su espuma
aislante. La c mara exterior de a bordo, como ya es habitual, mostr¢ todo el
viaje hasta la separaci¢n del enorme dep¢sito. El Atlantis apag¢ sus
motores principales unos 8 minutos despu‚s del despegue, alcanzando una ruta
baja preliminar que despu‚s elev¢ hasta los 155 por 230 km, gracias a sus
motores de maniobra OMS. Antes, la tripulaci¢n, comandada por Rick Sturckow, e
integrada adem s por el piloto Lee Archambault y los especialistas de misi¢n
Patrick Forrester, Steven Swanson, John "Danny" Olivas, Jim Reilly y
Clayton Anderson, fotografi¢ y grab¢ en video el tanque externo, para
identificar en ‚l posibles da¤os en el sistema aislante que a su vez hubieran
podido protagonizar episodios de impacto contra el transbordador. El an lisis
de las im genes se har¡a durante las horas siguientes, gracias a los expertos
en tierra.
La misi¢n, llamada STS-117 (13A), tendr como principal objetivo la
instalaci¢n de un nuevo grupo de paneles solares. Los segmentos S3/S4 que el
Atlantis transportaba a bordo pesan 17,5 toneladas, y extender n la capacidad
generadora de electricidad del complejo orbital. En la nave tambi‚n se
encontraba Clayton Anderson, que sustituir a Sunita Williams como miembro de
la actual expedici¢n de larga duraci¢n en la ISS. Tanto Williams,
como sus compa¤eros rusos Fyodor Yurchikhin y Oleg Kotov, contemplaron el
lanzamiento de sus colegas gracias al circuito de televisi¢n de la estaci¢n,
que recibi¢ un enlace desde el centro de control.
Mientras se trabajaba en el an lisis de las im genes obtenidas durante y
despu‚s del ascenso, los astronautas abrieron las compuertas de la bodega de
su veh¡culo. Tambi‚n prepararon los ordenadores y otros equipos para la fase
de aproximaci¢n a la estaci¢n, que precisar¡a de dos d¡as. Durante este
tiempo,
deber¡an usar el brazo rob¢tico del Atlantis para inspeccionar su escudo
t‚rmico, en busca de posibles da¤os producidos por impactos. No necesitaron al
principio dicho brazo para descubrir que una de las mantas blancas de
protecci¢n t‚rmica situadas sobre uno de los motores OMS se hab¡a despegado de
la superficie, posiblemente por alg£n golpe. El tanque externo hab¡a soltado
algunos fragmentos de espuma durante el despegue, pero ninguno choc¢ contra el
veh¡culo, excepto quiz en este punto. Durante la comprobaci¢n del
funcionamiento del brazo rob¢tico, los astronautas acercaron sus c maras a ‚l
y enviaron las im genes a la Tierra para su estudio.
Tal y como estaba previsto, Patrick Forrester y Steven Swanson
manipularon el brazo para unirlo al sistema OBSS, una larga p‚rtiga articulada
y equipada con c maras que utilizaron para examinar de forma concienzuda los
bordes de las alas y otras reas cruciales del escudo t‚rmico del Atlantis,
como el morro.
Con el OBSS volvieron a inspeccionar la zona de la manta t‚rmica sobre el
motor de maniobra, para lograr mayor detalle. Otros compa¤eros se dedicaron a
preparar el acoplamiento con la estaci¢n internacional, extendiendo el anillo
de uni¢n, y poniendo a punto las herramientas que necesitar¡an para asistir en
la maniobra, como por ejemplo, una c mara que se emplear¡a para alinear
perfectamente los dos puertos de atraque. Asimismo, Danny Olivas, Jim Reilly y
Clay Anderson empezaron a preparar los trajes espaciales que se utilizar n
durante las tres excursiones extravehiculares previstas.
En la ISS, los miembros de la expedici¢n prepararon a su vez las c maras
digitales que utilizar¡an durante la llegada del transbordador, y presurizaron
el puerto de atraque del m¢dulo Destiny.
La fase de acercamiento se desarroll¢ perfectamente. A unos 200 metros de
la estaci¢n, el Atlantis detuvo su marcha durante unos minutos y dio una
vuelta sobre s¡ mismo, mientras los astronautas de la ISS fotografiaban su
escudo t‚rmico con sus c maras de alta resoluci¢n. De esta forma, los
especialistas
podr n determinar si existen da¤os en esta zona no visible desde el brazo
rob¢tico del veh¡culo. Completada la maniobra, el Atlantis prosigui¢ la
aproximaci¢n, cada vez m s lentamente, hasta que los anillos de acoplamiento
entraron en contacto a las 19:36 UTC del 10 de junio. Firmemente unidos, y
comprobada la ausencia de fugas de aire, se abrieron las escotillas entre la
nave reci‚n llegada y el m¢dulo Destiny, y las dos tripulaciones pudieron
reunirse por primera vez. Rick Sturckow, el comandante, fue el primero en
entrar en la estaci¢n, a las 21:04 UTC, siendo seguido por sus compa¤eros de
misi¢n. Tras la efusiva bienvenida, los 10 astronautas iniciaron
inmediatamente el protocolo previsto. Oleg Kotov y Clayton Anderson
trasladaron el asiento personalizado de este £ltimo al interior de la nave
Soyuz, lo que convirti¢
oficialmente al americano en miembro de la expedici¢n de larga duraci¢n n£mero
15 (00:55 UTC del 11 de junio). De la misma manera, Williams pasaba a ser
ahora miembro de la tripulaci¢n del Atlantis, y en caso de emergencia, su
puesto estar¡a a bordo del veh¡culo estadounidense.
La siguiente tarea importante fue "agarrar" la estructura S3/S4, situada
en la bodega del transbordador. Lee Archambault y Patrick Forrester utilizaron
para ello el brazo rob¢tico, elevando la que hasta hoy es la carga m s pesada
enviada al espacio por el Space Shuttle, y situ ndola al alcance del brazo de
la estaci¢n, el Canadarm-2. A las 00:28 UTC, Suni Williams us¢ este £ltimo
para
hacerse cargo de la nueva adici¢n al complejo. Permanecer¡a as¡ lista para su
instalaci¢n, prevista para el lunes. El grupo de paneles solares, con un coste
de 367 millones de d¢lares, ser situado en el extremo del segmento S1, bajo
la supervisi¢n de Archambault, Kotov y Forrester. En el exterior, Reilly y
Olivas
vigilar n la maniobra y despu‚s conectar n algunos cables y liberar n las
sujeciones de los paneles, asegurados para el lanzamiento. Para preparar su
excursi¢n, los dos astronautas pasar¡an la "noche" dentro del m¢dulo esclusa
Quest, donde purgar¡an el nitr¢geno de su sangre.
En la Tierra, se est valorando si utilizar una r pida excursi¢n espacial
para resolver el problema de la manta de protecci¢n t‚rmica sobre el motor
OMS. La zona no es cr¡tica pero si existe la m s m¡nima preocupaci¢n para la
reentrada, la NASA podr¡a autorizar el trabajo de reparaci¢n. En otros vuelos
se han perdido losetas t‚rmicas en esa zona y no ha sucedido nada, aunque
s¡ algunos da¤os por el calor que tuvieron que ser luego reparados. En la
nueva filosof¡a de m xima seguridad, los ingenieros deber n indicar si es
mejor intentar colocar la manta en su lugar y pegarla (un paseo espacial
siempre es arriesgado), o dejarla tal cual est .
M s informaci¢n en:
http://www.nasa.gov/station
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Saludos de Victor,
HR1VOZ @ HR1PAQ
Hora/Fecha UTC: 01:33, 14 Jun del 2007
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